La muda de pelo en gatos es un proceso natural. En primavera y otoño los gatos mudan su pelo. Es cuando más se les cae.

La muda de pelo en gatos: ¿para qué sirve?

La mayoría de los gatos mudan su pelo cuando empieza el buen tiempo para adaptarlo a las temperaturas más cálidas, y cuando llega el frío para protegerse. Sirve para adaptar el pelaje a las nuevas condiciones climatológicas y a las variaciones de las horas de luz del día. En los gatos domésticos de interior la muda de pelo puede verse atenuada. Los contrastes de temperatura entre estaciones son menores. Nuestras calefacciones y aires acondicionados atemperan el ambiente.

Otras causas de la caída de pelo en gatos

Además de la muda natural, los gatos pueden sufrir una caída de pelo asociada a causas patológicas.

Vamos a ver las más habituales:

1- Estrés: Es una de las principales causas de la caída de pelo en gatos. Los gatos son muy sensibles a los cambios en su entorno, ruidos y amenazas ambientales. Estos pueden provocar un cambio de comportamiento en el gato. También pueden afectar a su salud.  La caída de pelo en gatos puede ser un claro síntoma de estrés.

El estrés afecta al sistema inmune del gato y puede dejarlo mucho más expuesto a sufrir enfermedades.

Los estresantes más comunes:

• la amenaza de otro gato entrando en la bandeja de arena.
• la llegada de un recién nacido.
• la llegada de un perro a casa, o incluso.
• obreros haciendo obras en el hogar.

2- Nutrición inadecuada: El pelo está formado, en un 99%, a base de proteína. No toda la proteína tiene la misma calidad ni ayuda a prevenir la caída de pelo en gatos. Una buena alimentación con proteínas de alto valor biológico y alta biodisponibilidad es una de las principales armar contra la la misma.

Las dietas ricas en proteínas de alta calidad favorecen un pelaje más fuerte y previenen la caída de pelo.

3- Alergias: Los gatos también sufren alergias. La mayoría de alergias cursan con reacciones cutáneas. Si notamos que a nuestro gato se le cae el pelo fuera de las épocas de muda y la caída no parece estar ligada a ninguna otra causa ambiental, puede ser síntoma de una alergia. Las alergias alimentarias pueden generar alopecias localizadas o clapas y rojeces en el pelaje. Para combatirlas lo mejor es elegir una dieta de exclusión.

4- Otras enfermedades: Un gato puede perder pelo debido a alguna enfermedad de la piel. La más común es la tiña. Se identifica por la aparición de unas ronchas de color rojo en la piel.

Entre las enfermedades cutáneas que puede sufrir un gato, hay que destacar que algunas estarán producidas por bacterias y otras se relacionarán con la aparición de hongos. Ante cualquier sospecha en HuellaCanina.com aconsejamos la visita al veterinario.